En la escuela, los alumnos de Infantil tienen la oportunidad de lavar la ropa y hacerlo con sus propias manos.
Hoy en día, es poco común lavar la ropa a mano. Las lavadoras son muy prácticas y nos sacan mucho trabajo. Pero para los más pequeños, poder participar en esta tarea doméstica les aporta un gran valor. El trabajo que hay detrás va más allá de simplemente dejar la ropa limpia, puesto que requiere de cierta concentración para controlar los movimientos.
En este sentido, tienen que recordar los diferentes pasos que hay dentro de la presentación que se les muestra en clase. Por eso, necesitan tener un control motriz y, si todavía no lo tienen, aquí tienen la posibilidad de mejorarlo. Y no solo esto, sino que los alumnos, cuando trabajan, sienten que participan en su ambiente, que lo cuidan.
En casa pueden participar en muchas de estas tareas, animamos a las familias a tender la ropa con vuestros hijos, doblar la ropa juntos, guardarla en los armarios… Al principio os puede parecer complicado, ¡pero seguro que os sorprenderán!