Los más pequeños de la escuela no se quieren perder el buen tiempo y cuando el sol se deja ver, ¡Todos salen a disfrutarlo al bosque!
Les encanta pasear por el césped, algunos practican caminar en terreno irregular a la máxima velocidad que les permiten sus piernas y otros consolidan el gateo, una buena faena …
Qué alegría, ¡Ojalá fuera primavera cada día!