Entre los alumnos de 3º de la ESO hay bastante talento escenográfico. Me explico. En el primer trimestre y, en el marco de la asignatura de castellano, tuvieron que leerse el libro de El Conde Lucanor. El propio Conde Lucanor es un personaje que vive en un mar de dudas sobre muchos aspectos y para encontrar respuestas acude a Patronio, que le aconseja. Este, a su vez, le explica historias con una moraleja final.
Así pues, han adaptado a la actualidad un capítulo del libro y lo han interpretado delante de sus compañeros de clase. En primer lugar, han escrito un guion y luego lo han practicado antes de su interpretación. La originalidad ha sido la bandera de todos los grupos y ha sido una manera amena y divertida de trabajar el libro de lectura.