Ir al teatro siempre es una experiencia, especialmente en la escuela, porque la aventura comienza en el momento en que se toma el bus que nos lleva hasta Girona. Después, practicamos algunas normas de seguridad vial como atravesar por el paso de peatones. En el teatro, estar bien sentado y haciendo silencio mientras dura el espectáculo también se convierte en un reto y un aprendizaje.
En esta ocasión, la experiencia ha culminado tras el espectáculo de sombras chinas que hemos ido a ver a La Planeta, «El cerdito que quería ver el mundo desde arriba», porque nos han explicado cómo se hacen las sombras chinas y nos han dado ideas sobre cómo fabricárnoslas en casa. Así que si algún día ve unas sombras sospechosamente divertidas por casa… no se asuste, son sus pequeños y pequeñas creando.